La crisis que provocó la aparición del COVID-19 nos obligó a parar el ritmo de nuestra vida diaria. Aunque durante la cuarentena hubo muchas personas que han seguido utilizando su vehículo, ya sea para ir al trabajo, para ir al supermercado o para asistir a algún familiar mayor, también están los que, gracias al comercio de proximidad y al teletrabajo, han dejado estacionado su auto durante un buen tiempo. Una vez que termine el aislamiento obligatorio, estos vehículos volverán a estar en circulación. Si este es tu caso, prestá atención a estos consejos antes de volver a circular.
A continuación te contamos seis cosas muy importantes que tenés que revisar antes de volver a circular con un vehículo que lleva mucho tiempo estacionado:
1. Estado de la batería
La principal perjudicada por la inactividad es la batería. En caso de que el vehículo directamente no arranque, así como tampoco se enciendan los pilotos del salpicadero, el motivo más probable es que se haya descargado. En este caso vas a necesitar unas pinzas eléctricas para recargarla utilizando la batería de otro vehículo o también podés usar un cargador de batería externo.
2. Niveles de líquidos
Una de las revisiones que hay que hacer de forma periódica es la de los líquidos. Incluso si no usas tu auto durante una temporada, los líquidos pueden disminuir. Entre muchas razones, por las condiciones atmosféricas. Lo primero que tenés que hacer es verificar si en el piso encontrás restos de líquidos. Después debes observar los niveles de los siguientes líquidos (podés consultarlo en el manual de tu vehículo):
- Líquido de frenos
- Aceite
- Limpiacristales
- Líquido refrigerante
3. Luces
También es muy importante que compruebes que todas las luces funcionen:
- Carretera
- Frenado
- Cruce
- Indicadores
4. Funcionamiento de los frenos
Es muy importante que te asegures de que los frenos funcionan correctamente. Al arrancar presta mucha atención al cuadro de mandos, en caso de que se encienda algún testigo relacionado con los frenos. Una vez hecho esto, recorré algunos pocos metros para verificar que los frenos respondan adecuadamente.
5. Neumáticos
Si alguno de los neumáticos está pinchado te vas a dar cuenta fácilmente. Es posible que encuentres el auto por los suelos después de tenerlo mucho tiempo parado. Pero prestá mucha atención a las ruedas. A simple vista puede llegar a parecer que están bien, pero no te confíes. Andá a la estación de servicio más cercana y comprobá que tengan el nivel de presión adecuado. Es muy peligroso manejar con las ruedas sin la presión correcta. En alguna parte del vehículo debería haber una etiqueta donde aparece indicada la presión en función de la carga de tu vehículo. También esto puede estar indicado en el manual del auto.
Y ya que estás haciendo una verificación, no está de más comprobar que los neumáticos no se encuentren desgastados.
6. Indicadores del panel de control
El panel de control de tu auto puede tener, varios testigos con toda clase de indicaciones: desde el nivel del líquido de frenos hasta la activación del freno de mano pasando por la temperatura del refrigerante. Es fundamental que compruebes que no se active ningún testigo que indique falta de suministro o avería. No te olvides de revisar el manual de uso de tu vehículo en caso de que no conozcas el significado de alguno de los testigos.
Estas son las posibles averías tras un período de inactividad:
A los autos más modernos algunos meses de inactividad no deberían afectarles, las consecuencias de un estacionamiento prolongado llegarían al acercarnos al año. No pasa lo mismo en vehículos que tengan ya varios años de antigüedad, en estos casos la inactividad podría tener consecuencias importantes ya que, por ejemplo, ciertas piezas del auto podrían arruinarse al no ser utilizadas. Las averías más frecuentes son las siguientes:
Sulfatado de la batería
Uno de los elementos más perjudicados por la inactividad es la batería del auto. No sólo puede descargarse, sino que también puede sufrir el sulfatado de los bornes. Esto pasa precisamente cuando no se recarga periódicamente, así como también cuando se calienta de más o los componentes no están apretados adecuadamente. Si notás que la afectación está en toda la batería, podés sustituirla por una nueva. En caso de que sean solo los bornes, podés realizarles una buena limpieza.
Deformación de los neumáticos
Además de la pérdida de presión, el punto de apoyo de los neumáticos, podrían haber quedado deformado al tener que soportar el peso del vehículo siempre en el mismo punto. Es fundamental que los revises y los cambies en caso de detectar irregularidades.
Avería del aire acondicionado
El aire hay que activarlo con regularidad para que funcione correctamente, aunque solo sea por algunos minutos. Al ponerse en marcha, el gas refrigerante comienza a circular y de esta forma se mantienen lubricados todos los elementos del circuito. Y recordá acudir a un profesional ante cualquier duda que tengas sobre fallos en tu vehículo.
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