Cada vez son más frecuentes los incendios en los hogares. La mayoría se relaciona a fallas en las instalaciones eléctricas, según lo confirman las estadísticas publicadas por la Superintendencia Federal de Bomberos. En los últimos 20 años, ha aumentado el consumo de energía en los hogares, en promedio este aumento es de seis veces más. Pero la mayoría de las instalaciones domiciliarias no acompañaron dicho cambio y, en muchos casos, han quedado precarias. Contratar personal que no esté capacitado, tener cableados deficientes y conectar varios electrodomésticos de alto consumo a enchufes “triples” son algunos de los errores más comunes que pueden ocasionar un incendio.
Es probable que identifiques bien estos potenciales riesgos con los que nos encontramos a diario, pero puede haber otros que no conozcas. Responde las preguntas que te dejamos a continuación y averigua si estás al tanto de cómo prevenir un incendio y si estás preparado para proteger de manera adecuada a tus seres queridos y a tu hogar.
¿Contás con un extintor de incendios?
Es una excelente idea tener en nuestro hogar un matafuego o extintor a mano. Por otro lado, existen muchos detectores de humo para pared o techo que te pueden resultar de gran utilidad. Hay muchos que ahora funcionan a batería, así que se instalan de manera muy fácil sin necesidad de ningún tipo de cableado.
¿Limpiás la campana de la cocina?
Resulta muy importante contratar a personal capacitado para que realice el desgrase y mantenimiento de los extractores al menos una vez al año.
¿Tomás precauciones al cocinar?
Al momento de cocinar hay que asegurarse de que los mangos de las sartenes no sobresalgan. Tampoco debés dejar desatendido lo que pongas sobre el fuego. Evitá la suciedad y acumulación de grasa que pueda ocasionar un incendio.
¿Limpiás el filtro de pelusas del secarropas de forma frecuente?
Te aconsejamos que limpies el filtro de pelusas del secaropas cada vez que lo vayas a usar, ya que las pelusas son consideradas como un material muy inflamable.
¿Cómo hacés el mantenimiento de tu estufa a gas?
Hacé revisar y chequear los conductos, las estufas y las cañerías de gas de forma regular por un gasista matriculado para asegurarte de que su funcionamiento sea el adecuado. Es importante que siempre dejes un espacio de ventilación cuando enciendas el calefactor.
¿Cerrás la llave del gas?
Al apagar calefactores o hornallas, tenés que cerrar la llave del gas, siempre. En caso de que sientas olor a gas o creés que puede haber alguna fuga, abrí las ventanas y no prendas ninguna luz porque esto puede ocasionar una explosión.
¿Cómo usás tu calefactor portátil?
Tenés que mantenerlo alejado de muebles y cortinas. Bajo ningún punto de vista lo uses para secar la ropa.
¿Tapás las lámparas para atenuar la luz?
Si por algún motivo necesitás atenuar la luz, lo mejor es que uses lámparas que cuenten con un regulador de intensidad. Nunca las cubras con telas o pañuelos, ya que estos podrían quemarse al tener contacto con la bombilla y convertirse en un peligro.
¿Tenés cuidado con lo que te rodea cuando fumás?
Te recomendamos que no enciendas cigarrillos cerca de ciertos lugares que podrían suponer un peligro, como por ejemplo aquellos donde se encuentran las tuberías de gas u otros materiales inflamables. Tampoco deberías fumar en el sillón o en la cama porque las telas pueden incendiarse con facilidad y muy rápidamente.
¿Vigilás las velas que encendés en casa?
Si sos de los que usan velas habitualmente, no las dejes desatendidas y apágalas si te vas a dormir o a otra habitación. Ponlas en un lugar estable en el que no corras el riesgo de que se vuelquen o se caigan.
¿Desenchufás la plancha si te vas a ausentar?
Desenchufá siempre la plancha cuando no la estés usando. Si la plancha está prendida y cae sobre la ropa, esto podría comenzar un incendio.
¿Coincidieron tus respuestas con las que te proporcionamos?
Hacé de tu hogar un lugar más seguro con estos consejos y recordá que si estás buscando un seguro para tu hogar lo podés encontrar en www.segurarse.com