Como sabemos hay diferentes clases de matafuegos para autos. Es necesario tener el conocimiento sobre cuáles existen y cómo deberíamos usarlos, dependiendo de cada situación particular.
Los extintores o matafuegos son la primer línea de defensa para combatir los incendios. Tener a disposición un matafuegos en el auto es fundamental para estar preparados ante una eventual emergencia. Es de vital importancia conocer cuáles son las alternativas más seguras y confiables para cada situación y para cada vehículo, ya que existen diferentes modelos con distintas funciones, y cada uno de ellos puede ser utilizado sólo para lo que se describe en la etiqueta del producto.
De acuerdo a lo que se estipula en la ley de circulación cada vehículo que se encuentre en circulación debe contar con un extintor de polvo ABC de 1kg. Esta clase de matafuegos debe ser portátil y está recomendado para combatir todo tipo de incendios, ya sea que se trate de materiales líquidos, sólidos o combustibles (como por ejemplo el tanque de gasoil o nafta).
El matafuegos es utilizado para diferentes situaciones, te va a permitir apagar incendios ocasionados por sólidos (el matafuegos A) es decir todos aquellos materiales combustibles ordinarios como lo pueden ser las telas, los papeles y muchos de los plásticos, así como también por líquidos (matafuegos B) inflamables o gases y combustibles, algunos de ellos son el kerosen y la nafta, y finalmente los eléctricos (matafuegos C) como por ejemplo los cables, los electrodomésticos y los interruptores automáticos como los que puede haber en nuestro hogar.
Son siete los puntos importantes acerca del extintor que debemos considerar si queremos viajar tranquilos y seguros:
1. Es muy importante que el extintor tenga un sello de certificación IRAM. Si tiene más de un año de antigüedad, tiene que ser debidamente controlado por un organismo especializado y autorizado.
2. La aguja que tiene el manómetro nos va a indicar de manera precisa si la presión interna es la debidamente necesaria. Si la aguja está en la zona verde (o puede ser negra en ciertos extintores) la presión es la correcta, si la aguja está en la zona amarilla nos dice que está en situación de riesgo, y por último, si está en la zona roja nos está diciendo que no está en condiciones aptas para su correcto funcionamiento.
3. Todo extintor cuenta con una duración de un año. Tenés que realizar todos los años la debida prueba de funcionamiento.
4. El extintor tiene que encontrarse en un lugar de fácil acceso para quien sea el conductor del vehículo. Lo mejor es debajo del asiento del acompañante o en los costados, obviamente sujetándolo correctamente.
5. Existen en el mercado muchos modelos distintos de palancas y válvulas de disparo de un extintor. Algunos matafuegos vienen con una traba de alambre, la cual debe ser retirada tirando del ojal. Existen otros que cuentan con un sistema que viene con un precinto de papel engomado el cual se rompe de forma fácil para habilitar la palanca de disparo.
6. Cuando lo tengas que usar, es muy importante que realices disparos cortos y te ubiques a una distancia de aproximadamente dos metros del fuego, además, tenés que observar cómo va evolucionando el fuego entre disparo y disparo. Lo recomendable es pararse siempre en una dirección favorable al viento. En los de 1kg. la total descarga dura más o menos entre 6 y 8 segundos, por lo tanto se debe usar en una situación de emergencia.
7. Después de que hayas usado el extintor, hay que despresurizarlo, y por más de que no lo hayas usado completamente, tenés que saber que ya no sirve para usarlo en el futuro.
Si manejás un auto, acordáte que tenés que llevar un matafuegos para proteger tu vehículo, a vos y a tu familia. Tu seguridad es lo primero. Por eso, si necesitás un Seguro de Auto, no dudes en ingresar a www.segurarse.com donde vas a encontrar a las mejores compañías del país con las mejores coberturas para tu vehículo.