Ya habíamos comenzado a hablar de los temas que llevan a los autos al taller. Como pudimos ver, todos tienen una manera de prevenirlos, más allá que a veces el mismo uso del vehículo ya signifique ir desgastándolo de a poco. Sin embargo, existen muchas maneras de retrasar el envejecimiento, inclusive de estar atentos a cualquier imprevisto.
Si todavía no leíste la primera parte, ponete al día. Acá ya vamos por la segunda, donde te vamos a ayudar a entender un poco más qué pasa con tu auto y su funcionamiento, ya que no saber ciertos tips nos llevan a estar en situaciones en las que no sabes ni cómo reaccionar. ¿Listos? Ahí vamos…
- Situación 4: Apretas y apretas el acelerador y nada… Te das cuenta de que llegarías más rápido si rompés un agujero en el piso del auto al mejor estilo Picapiedras, antes que confiando en la potencia de tu auto.
Si sentís que tu auto no responde de la manera en que te gustaría, mucho más lento de lo que realmente es capaz de marchar, entonces en este caso pueden ser las bujías. En general, las bujías se desgastan con el simple uso del auto, por lo tanto mientras más lo utilices, tenes más posibilidades de que presenten alguna falla. No solamente afecta la velocidad del automóvil, sino que también hace que gaste más nafta y hasta vas a escuchar sonidos raros que no estás acostumbrado a escuchar.
La manera de estar prevenido ante estos inconvenientes es llevar a tu auto a hacerse el service lo más a tiempo posible, y pedir específicamente que hagan un reemplazo de bujías.
- Situación 5: Te dormiste esta mañana, tomaste un café al paso, casi corriendo, mientras que a su vez vas poniendo los pantalones. Los chicos están parados, todavía dormidos, al lado de la puerta, con un paquete de galletitas en la mano, y pensás: «Están todos vestidos y con mochilas, vamos». Se suben todos al auto, cuando lo querés arrancar, no pasa nada. Hace un ruido como queriendo arrancar, pero… Nada!
Otra vez, el auto no arranca… Hace nada que cambiaste la batería gastada, así que eso no puede ser. Esta vez lo que podría llegar a ser el problema es el alternador. Esto es la parte de tu auto que hace que la batería se mantenga estable y cargada. La única que te queda en este caso es chequearlo de manera regular para ver cómo viene su estado.
También es posible que arranque, pero que no acelere correctamente, como en el caso anterior. Ojo, anda prestándole atención a lo que revisa tu mecánico también.
- Situación 6: 40 grados de calor en Capital Federal. Más o menos las 5 de la tarde, estás volviendo desde el trabajo hasta tu casa, en provincia de Buenos Aires. Te agarró el tráfico, la temperatura comienza a subir de a poco mientras estás como estacionado entre miles de autos esperando a que la avenida de descongestione. Lo primero que atinás a hacer es alcanzar la perilla del aire acondicionado y la pones al máximo. Esperás a que el aire se enfríe, pero seguís recibiendo de las rejillas por donde debería estar soplando el viento frío que te va a salvar la tarde una especie de aliento a motor tibio.
Sí, uno espera que se le pinche un neumático, que se le gaste la batería, pero jamás está lo suficientemente preparado para que se acabe el aire acondicionado. No solamente por la falta de aire frío es que nos podemos dar cuenta de que está fallando el aire acondicionado, sino que también podes llegar a ver que debajo de tu auto en el piso de donde lo dejaste estacionado aparecen manchas de anticongelante. Esto se debe a una fuga en el radiador. Lo único que hay que hacer es revisar los conectores, las mangueras y las abrazaderas. Si no se encuentran en buen estado, solamente hay que ir a cambiarlas. Conviene siempre estar atentos al mantenimiento del aire acondicionado, lo que mejora la el estado del radiador.
Con esta entrega, terminamos de comentarte sobre las principales razones por las cuales tu auto puede terminar en el mecánico. Desde el blog de Segurarse.com queremos aportar a tu seguridad desde todos los aspectos. Recordá si necesitás una cobertura para tu auto, podes entrar a www.segurarse.com y encontrar el seguro apropiado hasta con un 30% de descuento.